The Grupo Social ONCE blog on inclusive education

EL AÑO EN QUE APRENDIMOS A COVID-VIR

Viernes, 18 de diciembre de 2020

Estamos a unos días de acabar un año diferente, singular e inolvidable, que ha afectado a toda la población mundial, pero que sin duda ha marcado particularmente a las nuevas generaciones.

En el reciente informe de Unicef, “Impacto de la crisis por COVID-19 sobre los niños y niñas más vulnerables”, los efectos más inmediatos del confinamiento han sido el aburrimiento y la falta de estímulos, la incertidumbre y la falta de relación con las amistades.

Esto da cuenta de lo importantes que son las relaciones entre iguales y la sociabilización para un desarrollo integral y positivo en los más pequeños; de ahí que Unicef pida que el uso de dispositivos se limite a hora y media diaria, en niños de hasta 12 años.

LA DIVERSIDAD ENRIQUECE; LAS RELACIONES HUMANAS, MÁS.

El día da para mucho y es nuestro deber, como adultos, enseñarles que existen otras vías de esparcimiento como jugar, leer, salir a pasear, hacer deporte, cocinar, tener hobbies, etc., no limitando la actividad diaria a una sola afición digital o tecnológica, y más ahora que se acerca el periodo vacacional.

Si bien hablamos en anteriores publicaciones de que las tecnologías son herramientas facilitadoras de relación y comunicación que han permitido sobrellevar meses duros de confinamiento, se hace necesario reflexionar sobre nuestro cometido como adultos, y en este sentido, reflexionar sobre el apego que tenemos a las mismas, y las horas que les dedicamos a lo largo del día, bien por trabajo o por ocio. Debemos valorar qué ejemplo queremos dar a los más pequeños, apostando por las relaciones humanas, sin olvidar que la base del ser humano es su sociabilidad y empatía con sus iguales.

Puede que algunos digan que las tecnologías deshumanizan a la persona por prevalecer este tipo de relaciones virtuales y simultáneas, pero justamente por ello, se hace necesario reflexionar sobre este tiempo que nos ha tocado vivir y recuperar la base misma de las relaciones humanas y la interacción, independientemente de si son virtuales o presenciales.

REALIDAD VIRTUAL, COMUNIDAD REAL

Toca recuperar la empatía y enriquecer de nuevo nuestras relaciones sociales, nutrir los estímulos que provocan las ganas de aprender, rehuir del aburrimiento y fomentar de nuevo interacciones cercanas y humanizadas que no nos hagan olvidar lo que somos, seres sociales por naturaleza que necesitan de sus iguales para crecer y desarrollarse.

Inmersos en la era digital, no podemos encadenarnos a lo virtual, sino recuperar la esencia misma de nuestra naturaleza, que es crear lazos de relación social. 

NAVIDADES DIFERENTES PERO CON EL MISMO ESPÍRITU

Queda claro que estas navidades van a ser fechas de reuniones virtuales y acercamiento limitado. Estas navidades, nuestros lazos familiares saldrán reforzados, ya sea de forma virtual o presencial manteniendo las distancias, porque la fuerza del ser humano reside en su sociabilidad y empatía.

“Hay que unirse, no para estar juntos, sino para hacer algo juntos.”

Juan Donoso Cortés, ensayista español.

CONTENT RELATED TO THE 41ST ONCE SCHOOL CONTEST